Muchísima era la expectativa que había creado la vuelta del regional de safari a la capital provincial, la cual no se pudo cumplir al 100 % como es costumbre.
Una excelente convocatoria de pilotos, la que llego a 151 inscriptos en las distintas categorías, una gran cantidad de público que se hizo presente en los distintos sectores de la carrera, pero que no fueron suficientes para que el safari regional se luciera como lo hace fecha tras fecha, debido a falencias organizativas que dejaron en evidencia que es casi imposible volver a realizar una fecha en suelo "viedmense".El día sábado todo comenzaba con la concentración de los pilotos en un lugar extremadamente peligroso y molesto, ya que el lugar se encontraba a la vera de la ruta nacional 3, lo que resultaba tortuoso para quienes pretendían llegar hasta el lugar y para quienes transitaban por dicha ruta.
Luego los participantes se trasladaron a la zona de largada, la cual fue excesivamente peligrosa, tal es así que varios pilotos de motos sufrieron accidentes , y en la categoría simples se debió improvisar una doble largada para disminuir los riesgos.
En cuanto a la hoja de ruta, la mayoría de los participantes coincidieron en que fue por demás "liviana", mas parecido a un rally que a lo que se acostumbra a ver en un safari, viéndose reflejado en la llegada, donde más de 50 motos llegaron en 10 minutos al igual que 30 jeeps, con la peligrosidad que esto acarrea.
Una excelente convocatoria de pilotos, la que llego a 151 inscriptos en las distintas categorías, una gran cantidad de público que se hizo presente en los distintos sectores de la carrera, pero que no fueron suficientes para que el safari regional se luciera como lo hace fecha tras fecha, debido a falencias organizativas que dejaron en evidencia que es casi imposible volver a realizar una fecha en suelo "viedmense".El día sábado todo comenzaba con la concentración de los pilotos en un lugar extremadamente peligroso y molesto, ya que el lugar se encontraba a la vera de la ruta nacional 3, lo que resultaba tortuoso para quienes pretendían llegar hasta el lugar y para quienes transitaban por dicha ruta.
Luego los participantes se trasladaron a la zona de largada, la cual fue excesivamente peligrosa, tal es así que varios pilotos de motos sufrieron accidentes , y en la categoría simples se debió improvisar una doble largada para disminuir los riesgos.
En cuanto a la hoja de ruta, la mayoría de los participantes coincidieron en que fue por demás "liviana", mas parecido a un rally que a lo que se acostumbra a ver en un safari, viéndose reflejado en la llegada, donde más de 50 motos llegaron en 10 minutos al igual que 30 jeeps, con la peligrosidad que esto acarrea.
El día domingo todo se traslado a la zona de Patagones, más precisamente a "La Baliza", con la novedad para el safari regional de transitar una hoja con zona de playa y arena casi en su totalidad, lo que hizo muy atractivo para los participantes que aprobaron la iniciativa. Algo muy importante que no se tuvo en cuenta para esta etapa fue el lugar de transito de los auxilios, de los cuales gran parte no pudo llegar a la zona de neutralización, por no contar con los vehículos menores, pero el resto, y que no contaba con un camioneta doble tracción sufrió encajaduras en la arena y un gran retraso debido a estos inconvenientes.En fin, mucha tela para cortar fue la que dejó la tercera fecha del regional, que vivió un fin de semana distinto a los acostumbrados, en muchos aspectos, sólo habrá que tomarla de experiencia para que los errores no se vuelvan a repetir.
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